El sector turístico en la Costa del Sol espera un otoño de récord, como mínimo en registros de ocupación y de gasto por visitante similares a los de octubre y noviembre de 2022. Por entonces ya se marcaron máximos históricos, aupados por el buen tiempo que se prolongó hasta después del puente de Todos los Santos. Tanto los portavoces de hoteleros y hosteleros como los técnicos de la Diputación remarcan la buena inercia que se trae de un verano inédito en termómetros como el aeropuerto.